¿Un scooter con un botón para hacer caballitos? Mi dignidad ya está oficialmente en preventa
Image Credit: Wheelie Fun Bike.
Hay ciertas verdades universales en este mundo. El cielo es azul, el café es una parte no negociable de mi mañana, y hacer un "caballito" es, y siempre será, el truco más genial que existe. Yo no pongo las reglas. Desde ese primer levantamiento tembloroso en una bicicleta Schwinn hasta dominar el acelerador en una motocicleta de verdad, levantar esa rueda delantera hacia el cielo es un rito de iniciación.
Con los años, la tecnología ha evolucionado de maneras que me vuelan la cabeza. Tenemos supermotos eléctricas que son más silenciosas que mi lavavajillas y aviones que se pilotean solos. Grandes fabricantes como Ducati y Triumph incluso nos han dado el "Control de Caballito" (Wheelie Control) en sus motos, que es una forma encantadora y sofisticada de decir: "Toma, intenta no voltear accidentalmente esta máquina de $20,000 dólares sobre tu pecho, magnífico temerario". Es útil, claro, pero aún tienes que ponerle las agallas.
Pero ahora, una pequeña compañía de Sacramento ha analizado todo el proceso - el delicado baile de embrague, acelerador y equilibrio - y ha dicho: "Eso parece mucho trabajo. Hagámosle un botón".
Un botón. Para hacer caballitos. Por favor, permítanme presentarles la Wheelie Fun Bike, una máquina cuyo nombre es tan maravillosamente literal que es imposible no sonreír. Es una pequeña minimoto eléctrica, parecida a esas motos Coleman que se ven en los campamentos, pero viene cargada con una seria magia del siglo XXI.
Image Credit: Wheelie Fun Bike.
Ideada por un tipo llamado Jeff McCosker, este pequeño diablillo eléctrico promete convertir a cualquiera en un virtuoso de los caballitos. El secreto está en sus dos características principales. Primero, la estrella del espectáculo: el botón "Push To Wheelie" (Presiona para hacer un caballito). Lo presionas, lo mantienes apretado y la moto simplemente lo hace. Una vez que la rueda está en el aire, opera con un sistema de autoequilibrio. Inclínate hacia adelante para ir más rápido, inclínate hacia atrás para reducir la velocidad. Todo es muy futurista y suena sospechosamente fácil.
La segunda característica es lo que yo llamo el "Sistema de Preservación de la Dignidad", aunque ellos lo llaman la "Barra Antivuelco Digital" (Digital Wheelie Bar). Este ingenioso pedazo de código evita que te vayas demasiado para atrás y experimentes ese momento que te para el corazón, justo antes de que la moto y la gravedad decidan conocer íntimamente tu trasero. Es como tener rueditas de entrenamiento para verte increíblemente genial y, francamente, mi ego agradece la consideración.
Image Credit: Wheelie Fun Bike.
Este "no es un juguete" tiene unas credenciales eléctricas serias. La Wheelie Fun Bike está impulsada por una batería de 72 voltios y 10 Ah que alimenta un potente motor de cubo de alto torque de 5 kW, alojado en la rueda trasera de 6 pulgadas. Eso es suficiente jugo para darte unas 30 millas (unos 48 km) con una sola carga, que es tiempo más que suficiente para establecer tu dominio como la persona más cool del vecindario. ¿Y la velocidad máxima? Unas vertiginosas 35 millas por hora (unos 56 km/h). Puede que no suene a velocidad warp, pero en un vehículo del tamaño de una maleta grande, te aseguro que se sentirá como si te estuvieras preparando para la reentrada atmosférica.
Por supuesto, como vivimos en una era donde mi tostadora se conecta al Wi-Fi, hay una aplicación para esto. Puedes acceder a tutoriales de caballitos (como si presionar un botón necesitara un tutorial), cambiar entre modos de conducción e incluso ajustar la respuesta del acelerador y del freno. Hasta puedes ajustar el ángulo del caballito, por si acaso quieres empezar con un modesto "Oh, disculpen, parece que mi rueda delantera se ha levantado", antes de pasar a un rotundo "¡Contemplen, soy el maestro de la física!".
Image Credit: Wheelie Fun Bike.
¿Y cuál es el precio de esta inyección instantánea de diversión? La Edición Fundador (Founder's Edition) está disponible en preventa por $2,995 dólares, mientras que el modelo estándar se venderá por $3,499. Es una suma considerable de dinero por lo que es, en esencia, una máquina de felicidad. ¿Pero acaso se le puede poner precio a llegar a una parrillada en el patio trasero en una sola rueda? Yo creo que no.
Miren, mi trabajo es ser ligeramente escéptico con la nueva tecnología eléctrica. ¿Es práctica esta moto? Para nada. ¿Resolverá los problemas de movilidad urbana? Jamás. Pero ese no es el punto. El punto es la diversión. Se trata de capturar esa pequeña chispa de alegría que todos sentimos la primera vez que nos regalaron una bicicleta por nuestro cumpleaños. Como scooter, este aparato es deliciosamente absurdo, brillantemente innecesario, y me está encantando, absoluta y completamente.